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Cuidados para una buena salud respiratoria

Cuando piensas en lo que hacen tus pulmones seguro te viene a la mente a todo lo que están expuestos, no todo lo que respiras es lo ideal. La mayor parte de lo que respiramos es aire, desgraciadamente la mayoría está contaminado, también inhalamos polvo, humo, polen, virus microscópicos y bacterias.

Hay varios factores que pueden afectar la salud pulmonar, incluidos los niveles de actividad física, la genética y las condiciones ambientales. Los pulmones, al igual que el corazón, articulaciones y la piel, envejecen con el tiempo. Pueden volverse menos flexibles y perder su fuerza, lo que puede dificultar la respiración. Al adoptar ciertos hábitos saludables, puede mantener mejor la salud de estos y hacer que funcionen de manera óptima incluso en la vejez.

A continuación te contamos de las enfermedades pulmonares más comunes.

  • Asma, las vías respiratorias están constantemente inflamadas y pueden sufrir espasmos, causando sonidos parecidos a silbidos dentro de los pulmones y dificultad para respirar. Las alergias, las infecciones, la contaminación o, a veces, episodios intensos de ejercicio pueden desencadenar síntomas de asma.
  • Enfermedad pulmonar obstructiva crónica o EPOC, es una enfermedad pulmonar progresiva, que varía de leve a grave, se caracteriza por dificultad para respirar y flujo de aire restringido dentro y fuera de los pulmones. La EPOC abarca afecciones crónicas como la bronquitis y el enfisema.
  • Enfisema, es una forma común de EPOC y afecta la estructura física de los pulmones. Cuando tienes enfisema, las paredes entre cada saco de aire pierden su fuerza y elasticidad debido al daño pulmonar crónico. Con el tiempo, las paredes se rompen, creando cada vez menos sacos de aire.
  • Bronquitis, es la inflamación de los bronquios, los conductos que llevan aire a los pulmones. Provoca tos persistente, lo que a veces dificulta la respiración e incluso puede provocar dolor en el pecho y sibilancias respiratorias. Por lo general aparece después de sufrir un resfriado común.
  • Neumonía, es un tipo de infección respiratoria que afecta a los pulmones. Las infecciones por neumonía pueden ser bacterianas o virales, lo que determina el tipo de síntomas que una persona desarrolla debido a la enfermedad. Al principio de la enfermedad los síntomas son los mismos a una infección por una bacteria o un virus, fiebre leve, tos seca, dolor de cabeza, dolores musculares y fatiga o debilidad. La mayoría de las personas comienzan a presentar síntomas de neumonía más graves dentro de los tres días posteriores a la aparición de la infección, que incluyen problemas para respirar, tos con mucosidad y fiebre más alta.
  • COVID-19, en los últimos dos años ha sido una de las enfermedades más comunes y con mayor indice de mortalidad. Puede causar complicaciones pulmonares como neumonía y, en los casos más graves, síndrome de dificultad respiratoria aguda o SDRA. La sepsis, otra posible complicación puede causar un daño duradero a los pulmones y otros órganos. La neumonía que causa el COVID-19 tiende a afectar ambos pulmones. Los sacos de aire de los pulmones se llenan de líquido, lo que limita su capacidad para absorber oxígeno y provoca dificultad para respirar, tos y otros síntomas. Con el tiempo, aparece la falta de aire y puede provocar el SDRA, una forma de insuficiencia pulmonar. Los pacientes con SDRA a menudo no pueden respirar por sí mismos y pueden necesitar asistencia respiratoria para ayudar a que el oxígeno circule por el cuerpo.

Como viste, las enfermedades pulmonares son algo complejas e incluyen síntomas que suenan algo aterradores. El tener buenos hábitos puede ayudar a aminorar o evitar los síntomas de cada padecimiento. La dieta es uno de los principales hábitos que juegan un papel clave en la salud respiratoria, e incorporar algunos de los mejores alimentos para los pulmones en la dieta es una estrategia simple y fácil que puede disminuir la inflamación, mejorar la función pulmonar y ayudar a sanarlos. Te dejamos algunos alimentos que pueden ayudarte a tener unos pulmones de acero.

  • Manzanas, los fitoquímicos que se encuentran en las manzanas disminuyen el estrés oxidativo y la inflamación, lo que potencialmente podría mejorar la función pulmonar.
  • Té verde, tiene antioxidantes y polifenoles que pueden ser beneficiosos para la función pulmonar, incluido el galato de epigalocatequina (EGCG), que se ha demostrado que ayuda a suprimir el crecimiento de células de cáncer de pulmón en estudios in vitro. También contiene teofilina, un poderoso compuesto que actúa como broncodilatador para mejorar la función de las vías respiratorias y aliviar las dificultades respiratorias.
  • Ajo, posee poderosas propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que pueden ayudar a proteger contra el estrés oxidativo dentro de los pulmones y en todo el cuerpo.
  • Jengibre, es una especia potente que ha sido ampliamente estudiada por sus propiedades medicinales, especialmente cuando se trata de la salud pulmonar ya que por su capacidad antioxidante y antiinflamatoria puede disminuir el daño pulmonar y proteger contra la inflamación y los niveles excesivos de oxígeno.
  • Cúrcuma, sus propiedades antiinflamatorias podrían ayudar en el tratamiento de varias afecciones respiratorias, como asma, EPOC, síndrome de dificultad respiratoria aguda, lesión pulmonar y fibrosis pulmonar.

Es importante que tengas en mente que alimentarte de una manera saludable es solo una pieza del rompecabezas. Hacer ejercicio, no fumar y evitar la contaminación en interiores y exteriores son otras estrategias importantes que pueden ayudar a mantener los pulmones sanos y fuertes.

Los alimentos que te mencionamos anteriormente tienen propiedades que sin duda harán que tu salud pulmonar mejore pero desgraciadamente debes de tomar y comer una cantidad algo alta para conseguir todos sus beneficios. Es por eso que te recomendamos que tomes algunos suplementos que sin duda podrán ayudarte más rápido. Aparte del ajo, la cúrcuma, té verde y el jengibre que puedes encontrar en cápsulas también puedes incluir lo siguiente:

  • Saúco, tiene un alto contenido de vitamina C y antocianinas (un tipo de flavonoide) que estimulan el sistema inmunológico, proporcionan una rica fuente de antioxidantes y son responsables de los vibrantes colores azules, púrpuras, negros y rojo anaranjado de muchas frutas y verduras.
  • N-Acetil Cisteína (NAC), un aminoácido que funciona como antioxidante y que está presente en todo el cuerpo, pero más concentrado en el hígado y los pulmones.Los antioxidantes como el NAC ayudan a los pulmones a tener una respuesta óptima a las cosas que respiramos. Se ha demostrado que promueve la actividad antioxidante en los pulmones y apoya la respuesta normal a la inflamación.
  • Vitamina C, se encuentra en una variedad de frutas y verduras. Por su efecto antioxidante puede proteger contra enfermedades pulmonares y ayuda a preservar la función pulmonar. También puede reducir el daño del tejido pulmonar y brindar a tu cuerpo la oportunidad de reparar estos tejidos.
  • Vitamina D, esta vitamina es muy popular ya que ayuda con la salud de los huesos y ayuda a mejorar la salud inmune; en los últimos años se ha estudiado que es capaz de inhibir las respuestas inflamatorias pulmonares y nos protege contra patógenos respiratorios.
  • Vitamina A, es fundamental para el funcionamiento de su sistema inmunológico y es vital para el crecimiento celular y la capacidad de diferenciarse entre sí. Obtener suficiente vitamina A ayuda al cuerpo a iniciar el proceso de reparación natural en los pulmones. Tener deficiencia de esta vitamina altera la forma de los pulmones y desgasta el tejido que los protege.

Para gozar una mejor salud no sólo debes de cuidar tu alimentación o tomar suplementos, los pulmones son uno de los órganos que más debemos de cuidar ya que si hay alguna deficiencia en ellos no podríamos hacer ninguna de las actividades que normalmente llevamos día con día. Es muy importante que te ejercites, comas sano y equilibrado, si fumas procura disminuirlo poco a poco y en caso de tener una enfermedad pulmonar o antecedentes de una, toma las precauciones necesarias.

Fuentes

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