Cómo el calor y la humedad afectan tus niveles de azúcar en sangre
Puede ser verano, pero no estás solo si te preguntas por qué se siente mucho más cálido de lo habitual este año. La contaminación, la deforestación, el aumento del uso de plástico... todo eso está afectando el clima, y con el cambio climático llegan temperaturas más cálidas. De hecho, ¡este ya es uno de los años más cálidos de la historia! Las olas de calor son cada vez más comunes y la humedad está en aumento. Con todos estos factores considerados, ¿alguna vez te has preguntado si todas estas altas temperaturas afectan tu salud?
No es ningún secreto que el calor y la humedad causan deshidratación y sudoración. Sin embargo, lo que es posible que no sepas es que esto también puede afectar tus niveles de glucosa en sangre. Las personas con enfermedades crónicas como la diabetes pueden ser más sensibles a esto, lo que puede ocasionar problemas en el manejo de la enfermedad y los niveles de glucosa en sangre en condiciones de calor intenso y humedad.
Cómo el calor afecta el azúcar en sangre
El calor se asocia a menudo con la presión arterial baja debido a la sudoración intensa, lo que lleva a la deshidratación. La presión arterial es la fuerza que tu sangre aplica sobre tus arterias y venas, la cual depende del volumen sanguíneo. Por ejemplo, si tu volumen sanguíneo es superior a 140/90 mm Hg, tu presión arterial es alta, y si el volumen es inferior a 90/60 mm Hg, tu presión arterial es baja.
La deshidratación puede disminuir la cantidad de líquido que circula por tus venas, lo que lleva a una presión arterial baja. Sin embargo, cuando te mantienes hidratado, el volumen sanguíneo se diluye, se mantiene dentro de parámetros normales y las concentraciones de glucosa en sangre disminuyen. Entonces, ¿cómo influyen todo este calor, humedad y presión arterial en la glucosa en sangre? Sigue leyendo para descubrirlo.
Aumento de la deshidratación y los niveles de glucosa en sangre
Los signos más comunes de deshidratación incluyen falta de energía, disminución de la micción, dolores de cabeza, sed frecuente y piel seca.
Recuerda que las hormonas son los mensajeros químicos de tu cuerpo. Ayudan a evitar que tus órganos experimenten diversos problemas de salud a medida que viajan por tu torrente sanguíneo. Para hacer esto, deben unirse a receptores en células específicas. Por ejemplo, la insulina, una hormona que ayuda a equilibrar tus niveles de glucosa en sangre, se une a receptores en las células y les indica que absorban la glucosa y la transforman en energía.
La deshidratación puede estimular la liberación de vasopresina, una hormona antidiurética que ayuda a controlar el equilibrio de líquidos. Cuando estás deshidratado, esta hormona evita que elimines el líquido y trata de conservar la mayor cantidad de agua posible.
Alteración del uso de insulina por parte de tu cuerpo
Al igual que la insulina, la vasopresina se une a los receptores de tus células, indicándoles que inicien los procesos de glucogenólisis y gluconeogénesis. La glucogenólisis es cuando el glucógeno, la molécula de almacenamiento de glucosa en los músculos, se transforma en glucosa, aumentando los niveles de azúcar en sangre. Por ejemplo, cuando haces ejercicio, utilizas parte de las reservas de glucógeno en tus músculos para obtener la energía que necesitas.
La gluconeogénesis es cuando otros sustratos disponibles, como proteínas y grasas, se convierten en glucosa. Ambas situaciones pueden estimular el aumento de los niveles de azúcar en sangre en tu cuerpo.
Otro receptor que puede ser estimulado cuando tu cuerpo está deshidratado debido al calor es el hipotálamo, una pequeña área en tu cerebro que controla la temperatura corporal. El hipotálamo señala la liberación de cortisol, la hormona del estrés que aumenta los niveles de azúcar en sangre y puede generar resistencia a la insulina a largo plazo.
Provoca la dilatación de los vasos sanguíneos y aumenta la absorción de insulina
Los niveles de glucosa varían de una persona a otra y de un día a otro, según diversos factores, incluidos los cambios en la absorción de insulina. Los estudios demuestran que durante las temperaturas altas, la absorción de insulina se acelera. Esto es significativo para los diabéticos, ya que pueden necesitar ajustar la ingesta de insulina cuando cambia la temperatura para evitar alterar la absorción de insulina.
Tu temperatura corporal está controlada por el centro termorregulador. Cuando hace demasiado calor, las glándulas sudoríparas producen más sudor, que eventualmente se evapora. Los vasos sanguíneos que conducen a tu piel se dilatan para permitir que fluya más sangre y eliminar parte de este calor.
Aumenta el riesgo de agotamiento por calor, especialmente en personas con diabetes/prediabetes
Si tus niveles de glucosa son altos y se mantienen así durante mucho tiempo en tu torrente sanguíneo, puede causar problemas de salud graves. La deshidratación es uno de los factores que pueden hacer que el azúcar en sangre aumente, lo que hace que tu sangre esté más concentrada. Es esencial que las personas que padecen la enfermedad se mantengan hidratadas y eviten pasar demasiado tiempo en el calor, especialmente durante los meses más cálidos.
Aumenta el azúcar en sangre cuando se combina con una quemadura solar
El calor extremo modifica las enzimas, afectando todas las membranas celulares, lo que conduce a un golpe de calor. Por lo general, el sudor se evapora y ayuda al cuerpo a refrescarse, pero con una humedad muy alta, esto se vuelve más difícil, lo que resulta en una presión arterial alta y niveles altos de glucosa. En estos casos, tu cuerpo no puede sudar lo suficiente para enfriarse.
Los diabéticos tienen respuestas de sudoración más bajas y una mayor absorción de insulina, lo que a veces puede afectar negativamente el control glucémico. Pero, ¿cómo afecta la quemadura solar a los niveles de azúcar en sangre? En pocas palabras, cualquier forma de estrés puede estimular el hipotálamo en tu sistema endocrino, lo que influye en la absorción de insulina. La quemadura solar a veces puede ser una forma de este estrés para tu cuerpo. Si tu cuerpo responde a este estrés volviéndose resistente a la insulina, puede provocar un aumento en los niveles de glucosa.
¿Qué papel juega la humedad en el impacto en los niveles de azúcar en sangre?
Si bien las investigaciones son contradictorias en cuanto a si se suda más en climas secos o húmedos, la humedad sí afecta cómo te sientes. Recuerda que la forma en que tu cuerpo responde dependerá de varios factores, como la temperatura, tu nivel de actividad física, entre otros. Esto también puede ocurrir durante el ejercicio físico; se activan varios mecanismos de pérdida de calor para evitar el aumento de la temperatura corporal. Dado que la transferencia de calor depende de la sudoración, esta se ve afectada negativamente por las altas temperaturas y la humedad. Por lo tanto, las personas que padecen diabetes tipo 1 o tipo 2 pueden sentir que no pueden enfriarse de manera efectiva cuando hace demasiado calor. Cuando el ambiente es muy húmedo, también sientes más calor, lo que aumenta el riesgo de deshidratación. Cuando estás deshidratado, tu sudor no se evapora lo suficientemente rápido para enfriarte, lo que te pone en riesgo de problemas como agotamiento por calor y golpe de calor.
¿Te preguntas cómo saber si tu cuerpo se está sobrecalentando o si la cabeza y la humedad están afectando tu azúcar en sangre? Presta atención a señales como mareos prolongados, náuseas, dolores de cabeza, piel fría incluso a altas temperaturas, sudoración excesiva y disminución de la presión arterial.
Recuerda que cada persona puede responder de manera diferente al calor y la humedad, por lo que es esencial estar atento a los cambios en tu cuerpo y tomar medidas adecuadas para mantener un buen control de tu diabetes o de tus niveles de azúcar en sangre en general. Si tienes preocupaciones o notas un deterioro en tu control glucémico, es importante buscar la orientación de un profesional de la salud.
Espero que esta información te sea útil. ¡Mantente fresco y seguro!
Referencias:
Título: "Efectos del calor y la humedad en los niveles de glucosa en sangre en personas con diabetes: una revisión sistemática" Autores: García-Soidan, J. L., Cid-Fernández, J. A., De-La-Fuente-Fernández, M., Serrano-Sánchez, J. A., y Guede-Fernández, F.
Revista: International Journal of Environmental Research and Public Health. DOI: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/17316092/
Esta revisión sistemática investiga los efectos del calor y la humedad en los niveles de glucosa en sangre específicamente en personas con diabetes. Proporciona un análisis exhaustivo de diversos estudios científicos sobre el tema, examinando el impacto de los factores ambientales en la regulación de la glucosa en sangre. Los hallazgos de este estudio pueden respaldar la información presentada en el artículo anterior y agregar rigor científico a la discusión sobre la relación entre el calor, la humedad y los niveles de glucosa en sangre.